viernes, 21 de enero de 2011

Aprontando el nido

(Pintura: Juan Palliere)
Dicidite, china, y elegí la fecha,
si mal no te viene, pa dentro de un mes;
que, si Dios nos hace rendir la cosecha,
vamos a pedirle presupuesto al Juez.

Ya corté los yuyos, desbosté el chiquero
y al rancho lo tengo blanqueao a la cal,
lleno de ilusiones como pa soltero
pero amuebladito como pa casal.

Le haré sobrequincha cuando estemos juntos
después que conmigo vengas del altar,
pues no tengo a nadie que me dé los puntos
y un cristiano solo no puede quinchar.

Zapallos de tronco tengo más de ochenta,
surcos de muñatos tengo más de dos;
me sobra de todo pero hago de cuenta
que no tengo nada faltándome vos.

También tengo hacienda, pero por ahora
mis escasas reses no llegan ni a mil:
son el buey de canga, la lechera mora
y un chongo con sarna que cincha el barril.

Siempre media cama me queda vacía
porque duermo solo y es matrimonial;
y al ver que me sobra vivo ansiando el día
de ocuparla juntos y que sobre igual.

Si ya hay en el rancho riqueza bastante,
cuando nos casemos va a haber mucha más.
Yo sabré ser guapo y echar pa adelante
pa que vos te pases echada pa atrás.

Yo haré la tarea difícil y dura:
tirar el servicio, dar vuelta el colchón,
llenarte la tina, juntar la "fatura"
y acarrearte marlos pal lao del fogón.

Vos vas a ocuparte del trabajo chico,
como por ejemplo carpir y alambrar,
abrir sangraderos a pala y a pico
y arrancar las chircas pa después arar.

Rajar con el hacha rolos de ocalito,
desaguar cachimba, pozo y tajamar.
Tareas livianas, cuantito, cuantito
pa que no envicies con el buen pasar.

1 comentario:

tete boh dijo...

Bello, me gusto mucho sobre todo: "me sobra de todo pero hago de cuenta
que no tengo nada faltándome vos."
Je, gauchos eran los de antes!!!