jueves, 13 de septiembre de 2012

Sin libertad


Cuando amanece la aurora
con sus luces admirables,
empiezan todas las aves
a cantar en aquella hora.
La que se halla presa, llora,
con lo duro de sus grillos,
sirviéndole de martirio
ver a las otras que vuelan,
mientras penosas se quedan
pegadas a su destino.

Ya no sacude las alas
porque no afija en el viento,
sólo los tristes lamentos
se oyen dentro de la jaula.
¡Qué pesada y dura carga!
¡Qué pena tan sin igual
no poderse liberar
de tan grandes aflicciones!
¡tener plumas e ilusiones!...
¡Con alas y no volar!

Al fin por su mala suerte
pega un suspiro y se queda
parando su triste pena
hasta que llegue la muerte;
ya que su dolor no advierten
ni le tienen caridad,
triste se pone a pensar
en su largo padecer,
porque hasta el fin ha de ser
cautiva y sin libertad.
.............................................
(Décimas dictadas por don Pedro José Gómez. El señor Draghi Lucero tiene anotadas en su mencionado libro, unas décimas muy parecidas a las transcriptas,que demuestran una vez más la corriente cultural del Plata a los Andes o viceversa, por medio de los cantores carreteros).
Tomado del libro "Oro nativo" de Mario A López Osornio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

...cardenal amarillo...