"...guacho y gaucho me parecían lo mismo, porque entendía que ambas cosas significaban ser hijo de Dios, del campo y de uno mismo". (Don Segundo Sombra)
jueves, 11 de noviembre de 2010
Décimas a don Vicente Espinel
Se despierta el mes de mayo
y sobre un cielo español,
se ha desperezado el sol
con sus refulgentes rayos.
La tierra muestra sus cayos
sobre la morena piel,
y una rosa y un clavel
asoman sobre la fronda:
para contarnos que en Ronda
nació Vicente Espinel.
"¡Bienvenido seas Vicente!"
dice alegre el horizonte,
y los pájaros del monte
quieren besarle la frente.
Canta el agua de la fuente
su música más secreta,
y en el aire se proyecta
con la noticia halagüeña:
que allí en la tierra Rondeña
ha nacido el gran poeta.
Soldado y aventurero,
genio, loco, soñador.
Por su patria y por su honor
habrá de jugarse entero.
Es tomado prisionero
y conducido hasta Argel,
pero no pueden con él,
y junto a Vega y Cervantes,
asoma el áurea brillante
de don Vicente Espinel.
Mira sus manos: Diez dedos...
Una luz asoma leve.
Son diez versos. No se atreve
a darles forma... por miedo.
"¿Por qué no cantarte puedo?",
¡Eres la décima! ¡Vuela!,
¡Hija amada de mi escuela!
Sé que el mundo ha de quererte,
y a tí habrán de conocerte
como décima espinela.
Y así, en un hueco metida
de una guitarra española,
llega cortando las olas
hasta mi tierra querida.
Se hace hermana preferida
del nativo payador,
que la entona, con amor
expresando en sus diez versos,
sus angustias, sus esfuerzos,
su alegría y su dolor.
Gracias, ¡Gracias don Vicente!
Hoy traigo llenas las manos,
de las flores de mis llanos,
desde el sur del continente.
Vengo a dejar en su frente
mi décima sin espina,
mi presencia campesina
y al pie de tu monumento,
el alma y el sentimiento
de una mujer argentina.
1 comentario:
Marta Suint
dijo...
Gracias! por incluir mi poema en éste trabajo! Marta Suint
"Hay una hora de la tarde en que la llanura está por decir algo; nunca lo dice o tal vez lo dice infinitamente y no lo entendemos, o lo entendemos pero es intraducible como una música..." Jorge Luis Borges
"La pampa, señor, es como la serpiente..., lo magnetiza al hombre, lo encanta y lo adormece, y al fin se lo devora". (G.E. Hudson)
Visite al Gauchoguacho en...
Estancia "La Brava"
Pampa
Madre. Horizonte. Soledad. Llanura franca al sol que sólo sabe de tu curva...Cuna, sepulcro y sustento. Creadora del gaucho afirmativo, del caballo amigo de la distancia, del puma escondido y del chajá ascendente. Pretexto de vagabundas ansias de partir sin meta...¡Tú que das resignación al pequeño, empampado de infinito! Ricardo Güiraldes.
El hombre nacido en la pampa tiene todo el cielo y todas las estrellas que parece que se le vienen encima. Tiene las primeras luces del sol a la mañana y las últimas del anochecer. El horizonte es la primera abstracción para el hombre, ya que es una línea que se ve pero que no existe, porque en la medida que avanza, se aleja más. Nunca va a encontrar el horizonte, sin embargo está ahí. Entonces el canto de ese hombre es reflexivo, intimista, profundo, como asombrado por la grandeza de la inmensidad. (Suma Paz)
"La pampa con su mutismo imponente y su monotonía tan característicos, predisponían poco a la locuacidad. -'El campo es tan lindo, me decía cierta vez un gaucho, que no dan ganas de hablar" Leopoldo Lugones
Paisajes
Pareciera que se agacha la huella del horizonte, y uno se pierde en el monte hasta hallar una lomada. La tierra parece nada y en ella se afirma el hombre.
Presentación
De n'antes
De ranchos y taperas
Pa'la moza
Sucedidos
Oficios
Nuestros paisanos los indios
Cosas del campo
Baguales
Jenofonte dice que al andar a caballo se siente la necesidad de que a uno le crezcan alas... Así el caballo resulta no sólo maestro del músculo sino también del alma... El caballo educa, rige al hombre y le da una filosofía propia. La filosofía de un jinete es distinta a la de un caminador...En el caballo se aprende la vida. Sobre su cabeza nace la lejanía y entre sus cascos se fatiga la tierra. A todo el que va jinete en su caballo su soledad lo acompaña. (Eduardo Jorge Bosco). ..................................................................................
A un domador de caballos
"Cuatro elementos en guerra forman el caballo salvaje. Domar un potro es ordenar la fuerza y el peso y la medida: Es abatir la vertical del fuego y enaltecer la horizontal del agua: poner un freno al aire, dos alas a la tierra..." (Leopoldo Marechal)
Juiiira perro
Bichos de mi tierra
De chacota.
Canto con jundamento
Viva la Patria
Aquí me pongo a cantar
Cruz diablo
"He dicho muchas veces que aquí recibí mis primeras lecciones de abismo y de absoluto.
El cielo me las dió, me las dió la llanura abierta y desmesurada. (Olga Orozco).
Pero yo he vivido libre
y sin depender de naides
siempre he cruzao a los aires
como el pájaro sin nido,
cuanto sé lo he aprendido
porque me lo enseñó un "flaire".
1 comentario:
Gracias! por incluir mi poema en éste trabajo! Marta Suint
Publicar un comentario