domingo, 4 de marzo de 2012

El yeguarizo


a Emilio Solanet

Tembló la crin del pasto en la llanura
cuando el primer caballo relinchara
y el indio en la pelusa de la cara
sintió el frío sensual de su bravura.

Aguzó como el tigre la ternura
del celo posesivo que afilara
en la espera de siglos por la raza
conquista de esa briosa desmesura.

Tal vez su primer lazo fue el pantano
la zancadilla de las boleadoras
o la orfandad endeble del potrillo

pero del día en que le echó la mano
barrió la pampa destapando aurora
que hoy brillan en los ojos del padrillo.

2 comentarios:

Pablo Dobke dijo...

Don Emilio, dedicó su vida a los caballos, los criollos te festejan!
Con Gato y Mancha probó al mundo que el criollo era mucho más que un caballo y si un simbolo de nuestra raza.

Grande abrazo Don Luis.

Anónimo dijo...

me encanto!!!

muy sentida cada palabra...con lo que me gustan los caballos a me...

quye te puedo decir gacuchito ..me has emocinau con esa posia mi novia la soleda.... y que te digo de mi padre mate galleta...

hermoso tu blog....muy sentidor mi amigo..
desde que aqui comaparto un matecito...


saludos desde el noroestre argentino..

SAUVIGNONA