sábado, 3 de diciembre de 2011

Amadrinao

(Pintura: Alberto Güiraldes)

Yo te digo con razón
porque yo nunca lo niego
que hoy muy mansito me entrego
aunque antes fui cimarrón
voy al trote remolón
detrás tuyo relinchando
mientras vos vas escuchando
indiferente mis quejas
tu voz como un cencerro
me hace parar las orejas.

China me ataste a un palo
con un maniador muy fuerte
y amarrado de esta suerte
no he podido hacerme el malo
si alguna vez me refalo
en cuanto sienta los cueros
como me has hecho mañero
si algún día me retobo
pueda ser que de un corcovo
te desparreme el apero.

Yo te hice un tiro de lazo
te hinqué la espuela enconosa
y como eras recelosa
te crucé con un lazazo
no creyendo en el porrazo
te anduve facilitando
mientras que vos bellaqueando
endurecías la jeta
y aura con tanta gambeta
China, me llevás charquiando.

Pero ahora echaré en olvido
todas las habladurías
y espero ser algún día
tu almirador decidido
como presilla prendido
viviré siempre a tu lao'
por tu amor encandilao'
hasta que llegue a muy viejo
viviendo por allá lejos
para siempre acollaraos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La moza de don Alberto debe estar más ancha que la alpargata de la Eulogia...