(Pintura: Molina Campos)
Yo tuve una embarcación
marinera en las maniobras,
y livianita en el agua
como una pluma'e gaviota.
Desde la hechura fue buena,
mejor, ni tráida de Europa.
Yo pa'fantasear le puse
"La Suerte Navegadora".
Muy entendido en los trapos,
habilidad que me sobra,
la vestí de velas blancas
paqueta como una novia.
¡Me hubieran visto de mozo
por los puertos de estas costas
florearme en las atracadas
y changüisearle a las sogas!
Mi compaña era un paisano
sosegado y de habla corta,
pero se desacataba
en cuanto veía una moza...
Me acuerdo como si hoy fuera:
'taba bravo el Paraná,
hinchao de lomo a lo potro
y encrespao pa'corcovear.
Salimos póngale hamaca
zamarreaos p'acá y p'allá,
y el cielo, a más de la lluvia
nos empezó a cascotear.
¡L'apariencia del paisano
con las cerdas envinchadas;
meta y ponga mate amargo
paseándose con la pava!
Salimos del pericón
como "resienta" mojada.
Tuavía lo siento al bandido:
"¡se nos mojó hasta la caña!"
Me acuerdo que una ocasión
probando la patejiada
nos tanteó un manguruyú
como una flor de zaranda.
Era un juego a las cometas
al sesgo y "con cortes de hacha".
-¡Dele soga...!¡Tire, cumpa!
¡No se duerma... que no es cama...!
Diez metros tenía mi barco
y, cumpa... ¡por esta cruz!
cuando lo fuimos a alzar
sobraba el manguruyú!
Ahí nomás nos decidimos
y de piquera y bozal
lo llevamos a remolque
por un brazo'el Paraná.
Fleteábamos de lo lindo:
provistas, cueros, maderas,
harina, maíz, algún vicio,
azúcar, yerba y galleta.
Hasta con mentira y todo
entre unas bolsas laneras
fleteamos, no sé si creen,
la madre de las centellas.
Huyó en una resbalada
de tan cosquillosa que era;
¡Ni se calentó el cerdudo,
siguió pongo y ponga yerba!
Nunca me faltaba un real,
tenía siempre parejero,
buenas botas, rastra'e plata,
y "un nutria" como sombrero.
Ustedes no van a creer:
entre el indio yerbeador
y el caballo que conté
se me fue la embarcación.
El tape, mi corredor,
se me vendió en la carrera,
y el regalo'el ganador
fue mi lindo barco a vela.
Y después me anoticiaron
que por el lao de Corrientes
se la llevó... una creciente
y hasta la hembra le robaron.
¡Dónde andará, y con qué vientos
mi embarcación a estas horas!
Te he fondiao en los recuerdos
mi "Suerte Navegadora".
(Foto de Manguruyú Gigante: "Pimelodus zungaro")
LOS HERMANOS BALTAZAR
Hace 6 días
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