Homenaje a los Payadores en su día: 23 de Julio.
Payador, alma latente
de la canción popular,
puede en versos demostrar,
la rapidez de su mente.
Tiene su canto elocuente
toda la sabiduría
que un libro no encerraría,
pero que él fue cosechando
noche tras noche cantando
en ranchos y pulperías.
Cuando la Patria nacía,
el payador con su acento
desparramaba en el Viento
la nueva con alegría.
Entre sus versos tejía
los señeros pensamientos
de quienes en el momento
de jugarse, se jugaron
y a este suelo le brindaron
sus más puros sentimientos.
Fue el cronista musical
de nuestra naciente gloria,
el que le dio a nuestra historia
un sentido nacional.
Poeta vocacional,
crítico por intuición,
que de fogón en fogón,
al compás de su instrumento
despertaba sentimientos
de Patria y revolución.
Se fue al Norte con Belgrano
en el Ejército Grande
y después cruzó los Andes
junto al Gran Americano.
La guitarra entre sus manos
era un fusil de canciones
que hería los corazones
con versos sentimentales,
sembrando los ideales
de paz entre las naciones.
Después volvió a los cantones
a defender las fronteras,
y las estrellas sureras
dieron brillo a sus canciones.
En las ruidosas reuniones
de lejanas pulperías
cantó penas y alegrías
acariciando a su amada,
esa guitarra encintada
que fue su estrella, su guía.
En los campos de Caseros
donde Juan Manuel cayó
frente a Urquiza, que se unió
a masones y extranjeros,
el payador fue el primero
que supo entregar su vida
al ver su Patria querida
humillada e indefensa,
soportando la vergüenza
de una guerra fratricida.
Los señores progresistas
mil veces lo persiguieron
y hasta preso lo pusieron
tratándolo de anarquista.
Pero él, su idea altruista
sostiene sin claudicar.
Su voz ha de perdurar
por muchas generaciones
y han de vivir sus canciones
en el alma popular.
Señores: perdónenme
si en algo me he equivocado,
cuando en versos mal rimados
al payador le canté.
Desde niño yo admiré
a esos juglares del llano
que siempre guitarra en mano,
eternamente de viaje,
forman parte del paisaje
de este suelo americano.