Como soy de la llanura
me gusta ver la distancia
y disfrutar la fragancia
cuando la tarde murmura.
Suelta el bajo su frescura
ni bien reverdece el yuyo
me crié, sin hacer barullo
a campo, sin mucho esmero:
señores, yo soy surero
y por serlo, siento orgullo.
Mientras quede un payador
en las ruedas de fogones
no han de morir las canciones
ni el verso del floreador.
Que sin ser animador
lo sabe hacer muy amable
todo ritmo, es aceptable
mientras que Dios lo disponga
pero el que da la milonga
será siempre irremplazable.
Si en una radio se escucha
algún programa campero
no ha de morir lo surero
va a seguir firme en la lucha.
Y si el cantor desembucha
décimas como jugando,
el paisaje va pintando
por tal motivo le insisto
cosas que usted nunca ha visto
igual lo está imaginando.
Mas cuando llega la fecha
que se habla de Independencia,
tendrás que tomar conciencia
para seguir en la brecha.
Levantarás la cosecha
que sembraste en los caminos
con versos, cantos y trinos
podés decir satisfecho
que late dentro'e tu pecho
un corazón Argentino.
Y pa'florear la Bandera
no hace falta ser muy diestro
el que defiende lo nuestro
hace pata ancha ande quiera.
Del Himno Patrio quisiera
que me escuches un segundo
en esto, no me confundo
que a Dios, debemos la suerte
cantalo de pie, bien fuerte
porque es el mejor del mundo.
Cuando me ponga la marca
el dueño de mi destino
tendré que cambiar camino
ni bien me llame la parca.
Y si la luna está sarca
o el lucero no rezonga,
el sol su calor me oponga
porque voy rumbo a degüello,
tal vez mi último resuello
lo haga en ritmo de milonga.
1 comentario:
Excelentes las letras del Cimarron. Muy bien acompañadas por las ilustraciones. Felicitaciones! !!
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