En una noche clara
de majestuosa luna,
se ve de un cementerio
un ciprés descollar;
y en lápidas lujosas
de abovedadas tumbas,
el nombre está grabado
del que descansa en paz.
La brisa silenciosa
pasando blandamente
esparce de las flores
su aroma y su jazmín,
la silenciosa brisa
las lleva muellemente
entre las negras tumbas
del fúnebre jardín...
De pronto llega un joven
contrito y vacilante;
inclina una rodilla,
murmura una oración
y caen como unas perlas
sobre la blanca losa
las lágrimas que arranca
su tierno corazón.
-¡Oh!, ven, despierta ¿quieres?
¿por qué me abandonaste?
¿por qué no me llevaste
para dormir también?
No ves que solo a solas
con mi dolor profundo,
todo lo de este mundo
desprecio con desdén?
Y luego se oye un tiro,
y allí junto a la tumba
caliente aún el cadáver
del joven se encontró,
después, pasé al otro año
y la inscripción decía:
"Tanto él a ella quería
que en su tumba murió".
3 comentarios:
Mi abuelita Ana Gamboa q.d.D.g., nació en 1902 en San José, Costa Rica, y solia cantar esta letra en las tardes mientras se mecía en su sillón. Me emocionó mucho encontrarla aquí y compartirla con mi madre para recordar a mi querida abuelita. Me encantaría saber el autor y si hay una versión musical conocida. Saludos. Gustavo Soto
Creo que el autor de esta canciones es el argentino Gabino Ezeiza, y la verdad yo esta canción al escuché en el campo a una tía, en Cunaco, Chile, hace muchos de años atrás, pero no se si exista una versión de estudio.
Hola, esta cancion fue hecha para la prima de mi bisabuela que murio de tristeza por pensar que su novio la habia abandonado. Su novio la busco pero su mama no lo dejaba de verla. La novia quedo enferma y murio. El novio cuando volvio del ejercito y descubrio que ella habia muerto fue al cementerio y se mato en su tumba como dice lá cancion! La familia lo enterro junto con ella! Esta es una historia real y muy triste que ocurrio en Almuñecar-Granada-España
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