"...guacho y gaucho me parecían lo mismo, porque entendía que ambas cosas significaban ser hijo de Dios, del campo y de uno mismo". (Don Segundo Sombra)
martes, 12 de abril de 2011
Buena mano
Hace unos meses escasos,
me enteré que un tal Ramayo
vendía en el pueblo, un caballo
y lo fui a ver: ¡por si acaso!
Resultó que era un picaso
arratonao y bragao;
que su dueño acobardao
lo vendía por las razones
que en dos o en tres ocasiones
se había con él, disparao.
El hombre poco campero,
medio tirando a chambón,
lo había comprao redomón
a la viuda de un puestero.
Y aunque intentó con esmero
sacar una buena prienda
nunca pudo hallar la senda
y al dentrar a abalanzarse
era capaz de bolearse
con el peso de las riendas.
También era de cuidao
si lo montaban de apuro,
pues salía de lomo duro
mirándose los costaos.
Bufarrón y desconfiao
miraba con gesto altivo
y con un brinco a lo chivo
era capaz, sin ver cómo,
de abarajarlo en el lomo
ni bien pisaba el estribo.
Sincero como se ve
el hombre,me da esos datos
de igual modo al ser barato
el pingo le negocié.
Pa la casa lo llevé
ansioso como muchacho,
"acetando" sin empacho,
que por esas venturas
nunca le hallaba la cura
lo hacía moneda en el tacho.
Lo dejé esa noche atao
y al otro día bien temprano,
le eché la pampa a las manos
y al lomo todo el recao;
lo monté con gran cuidao,
de arriba lo desmanié,
al tranquito lo saqué
hasta pasar las bebidas,
y a campo abierto enseguida
a galopiar lo invité.
Ni bien pisó la gramilla
quiso ganar las alturas,
¿pero de ande que hay yerba pura
cuando en la bolsa hay semilla?.
-"Es un criollo el que te ensilla"
le recordé por mi cuenta,
y como manda el que muenta
con tan solo dos tirones,
le hice arar con los garrones
ande le eche los noventa.
Un tacazo a cada lao
le acomodé de propina,
y alguno por la pretina
al notarlo abatatao,
otro tirón bien pegao
le di pa su desconsuelo,
y sin dejarlo alzar vuelo
lo hice marchar largo trecho,
con la pera contra el pecho
que ni pisaba en el suelo.
Después de unas galopeadas,
por querer probarlo a fondo,
lo mandé al corral redondo
con tuita la novillada.
Cuanto intentó una monada
le entré apretar las clavijas,
y al ratito era una fija:
metido entre los terneros
como cuzco cocinero
que ha visto una sabandija.
La cuestión que de ese día
ando nomás bien montao,
sin que le encuentre al bragao
ni una falla todavía.
Y si esto sirve de guía
y alguna enseñanza deja,
vayan parando la oreja
que aquí me juego en el fallo:
¡es bueno cualquier caballo
cuando un criollo lo maneja!
"Hay una hora de la tarde en que la llanura está por decir algo; nunca lo dice o tal vez lo dice infinitamente y no lo entendemos, o lo entendemos pero es intraducible como una música..." Jorge Luis Borges
"La pampa, señor, es como la serpiente..., lo magnetiza al hombre, lo encanta y lo adormece, y al fin se lo devora". (G.E. Hudson)
Visite al Gauchoguacho en...
Estancia "La Brava"
Pampa
Madre. Horizonte. Soledad. Llanura franca al sol que sólo sabe de tu curva...Cuna, sepulcro y sustento. Creadora del gaucho afirmativo, del caballo amigo de la distancia, del puma escondido y del chajá ascendente. Pretexto de vagabundas ansias de partir sin meta...¡Tú que das resignación al pequeño, empampado de infinito! Ricardo Güiraldes.
El hombre nacido en la pampa tiene todo el cielo y todas las estrellas que parece que se le vienen encima. Tiene las primeras luces del sol a la mañana y las últimas del anochecer. El horizonte es la primera abstracción para el hombre, ya que es una línea que se ve pero que no existe, porque en la medida que avanza, se aleja más. Nunca va a encontrar el horizonte, sin embargo está ahí. Entonces el canto de ese hombre es reflexivo, intimista, profundo, como asombrado por la grandeza de la inmensidad. (Suma Paz)
"La pampa con su mutismo imponente y su monotonía tan característicos, predisponían poco a la locuacidad. -'El campo es tan lindo, me decía cierta vez un gaucho, que no dan ganas de hablar" Leopoldo Lugones
Paisajes
Pareciera que se agacha la huella del horizonte, y uno se pierde en el monte hasta hallar una lomada. La tierra parece nada y en ella se afirma el hombre.
Presentación
De n'antes
De ranchos y taperas
Pa'la moza
Sucedidos
Oficios
Nuestros paisanos los indios
Cosas del campo
Baguales
Jenofonte dice que al andar a caballo se siente la necesidad de que a uno le crezcan alas... Así el caballo resulta no sólo maestro del músculo sino también del alma... El caballo educa, rige al hombre y le da una filosofía propia. La filosofía de un jinete es distinta a la de un caminador...En el caballo se aprende la vida. Sobre su cabeza nace la lejanía y entre sus cascos se fatiga la tierra. A todo el que va jinete en su caballo su soledad lo acompaña. (Eduardo Jorge Bosco). ..................................................................................
A un domador de caballos
"Cuatro elementos en guerra forman el caballo salvaje. Domar un potro es ordenar la fuerza y el peso y la medida: Es abatir la vertical del fuego y enaltecer la horizontal del agua: poner un freno al aire, dos alas a la tierra..." (Leopoldo Marechal)
Juiiira perro
Bichos de mi tierra
De chacota.
Canto con jundamento
Viva la Patria
Aquí me pongo a cantar
Cruz diablo
"He dicho muchas veces que aquí recibí mis primeras lecciones de abismo y de absoluto.
El cielo me las dió, me las dió la llanura abierta y desmesurada. (Olga Orozco).
Pero yo he vivido libre
y sin depender de naides
siempre he cruzao a los aires
como el pájaro sin nido,
cuanto sé lo he aprendido
porque me lo enseñó un "flaire".
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