(Fotos: Gustavo Tarchini)
Apenas le apunta el bozo,
ya tiene que trabajar
con el hacha o con el carro,
hachando o para fletar.
Se hace hombre a los quince años
y viejo antes de enrolar;
para soldado no sirve,
si es pura debilidad.
Temprano se siente macho
y viejo antes de llegar;
sol, mala paga y trabajo;
duro, muy duro el yantar.
Queda con el cuerpo chico
y el alma sin voluntad;
cuando tan sólo es un chango
¡un changuito y nada más!
No hay comentarios:
Publicar un comentario