(Foto: Javier Echeverry)
Yo siempre quiero cantar
igual que el ave salvaje
y sin creer que mi plumaje
más que otro ha de brillar,
no es que quiera descollar
ni andarme vanagloriando
más, mis versos comparando
a una salvaje potrada,
dejarán su rastrillada
por donde vayan pasando.
YO siempre quiero cantar
porque el cantar me mantiene
un verso va y otro viene
y otro más quiere asomar,
no los puedo rechazar
porque llegan como el viento
y los recibo contento
porque me causan placer,
de a dos me suelen nacer
mellizos del pensamiento.
Templo mi guitarra y canto
porque me gusta cantar
cuando quiero recordar
lo nuestro que olvidan tanto,
bien alto el temple levanto
para que así la canción
tome más elevación
y llegue hasta esos lugares
donde ya no hay ni cantares
ni nada de tradición.
El nombre de Rastrillada
con que este verso bautizo
viene a ser como un petiso
punteando en una manada,
que en corta o larga jornada
según le toque marchar,
sus rastros ha de dejar
de amor al suelo bendito,
siguiendo aunque sea el tranquito
si no puede galopiar.
LOS HERMANOS BALTAZAR
Hace 6 días
1 comentario:
Bueno, soy humildemente un poeta soñador panameño,Carlos Araúz, y he querido hacer este comentario, pués la décima rastrillada de un poeta anónimo argentino me ha llamado la atención con el coraje y el sentido popular que le imprime al canto y es lastimoso que las cosas bellas tiendan a desaparecer,pero para mí ese canto no es olvido sino recuerdos. hasta pronto.
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