lunes, 31 de diciembre de 2012

Año nuevo



(Pintura: Molina Campos)


Anque
del sol, ni noticias
ya lo apronté al “doradiyo
y en la noche clara ensiyo
cuando la fresca es delicia,
y ya habrá de ser caricia
endentrando a galopiar,
que anque’s el pingo pa’ndar
sosegao, si güela un yuyo
es capaz de hacer baruyo
solopor verme charquiar

Po’el camino’e la galera
costiando los pajonales
podré cruzar los canales
por los puentes de madera;
evito de’sa manera
dir por “El Paso’e la Yegua”
con agua que no dá tregua
y que hay cruzar nadando;
elijo este andar andando
anque alargue media legua.

Ayá’l final del camino
en un potrero de ovejas,
me’spera el rancho’e la vieja
ya asiyonao y barcino;
hay un talar muy genuino
y unas cinas, pa’ reparo,
y atrás, un arroyo claro
que’vita tener jagüel.
Yo emplumé’nel nido aquel
y áhi siempre tuve mi faro.

Les cairé de sopetón
a la “Vieja” y mis hermanas
porque me’mpujan las ganas
de brindarme’ste alegrón;
es propicia la ucasión
porque asigún me parece
un año desaparece
y anque yo soy medio potro,
juntitos nomás, nosotros
recibiremos al “13”.
  
(31/12/2012)

Felicidades!!

(Pintura: Enrique Castro)

Da el último parpadeo

un fogón que ya se apaga
mientras que a su lao amaga
otro, en precoz escarceo.
Si te he visto hoy no te veo”
se le dice al que se va,
la rueda rodando está
y es una rueda la vida
y tras de rodar, cumplida,
un añito más no da.

La vida es una ‘función’
de indecifrable final,
a veces, como un panal,
otras, de gusto amargón.
Más hoy pongo la intención
al soñar éste deseo:
que se haga lindo, lo feo,
se güelva dulce, lo amargo.
¡Y hago en Navidá el encargo
paque’l “13” sea un floreo!

Nacimiento de Jesús (El Evangelio Criollo)

¡Feliz Navidad pa tuita la paisanada!
(Pintura: Carlos Montefusco)

 

Era una noche de invierno,
todo el mundo estaba en paz;
y amando Dios por demás
al hombre triste y siniestro,
tomó un cuerpo como el nuestro
pa no dejarnos jamás.

Y ansí nomás Jesucristo,
dende su Padre Estanciero,
agarró nuestro sendero
y jué un hombre como todos,
sin dejar por este modo
de ser el Dios verdadero.

Nació en un hueco de olvido
pudiendo nacer con fama;
jué recostado en la grama
porque ni apero tenía;
pudo ser reina su mama,
pero jué Mama María.

He venido Dios Eterno
seducido por su luz;
pa armar su cuna, Jesús,
en estos pagos hermanos,
con mi poncho de paisano
y unas plumas de avestruz.

Yo le dejo mi guitarra
rebalsando de sonidos;
y mientras queda dormido
con las notas de su canto,
deje que me acerque un tanto
pa escucharle los latidos.

lunes, 17 de diciembre de 2012

¡Cómo ha cambiao mi mujer!




Mi gaucha era retacona,
tostao el cuero, clinuda.
Llena de arrugas trompudas
y bastante barrigona,
bigotuda, narigona,
pelo lacio, labio grueso
y tenía, además de eso,
un lunar en la quijada
y le caiba la papada
escondiéndole el pescuezo.

La trenza larga y brillante,
hasta el anca le llegaba
y era cuando se enojaba,
más brava que ají picante.
De atrás como de adelante,
era de cuepro pareja;
y orillando la madeja,
con la comparancia que hallo:
su cabeza era un zapallo
tapando una tina vieja.

Pa Buenos Aires se jué
cuando me la aconsejaron
y allí tanto la cambiaron
que al hallarla me asonsé.
De nuevo me enamoré,
al verla desarrugada
con melenita enrulada,
labio fino, sin bigote...
Blanco y lisito el cogote,
sin lunar y sin papada.

Me contó que jué a un lugar,
ande remozan las viejas,
le despelaron las cejas,
y el cuero se hizo blanquear.
Lo pudo desarrugar,
escondiendo la costura
y cambiando la figura,
con el trote y la ginasia.
Puede áura lucir con gracia
anca, pechera y cintura.

Y ha quedao, lo más bonita,
elegante y delicada,
usa cada uña pintada
y anteojos con manijita.
Canta con su voz finita
lo mesmo que antes lo hacía,
pero, me habló el otro día,
de algo que me desespera:
¡Aura, quiere ser tanguera
de rayotelefonía!


(Foto de Sofía Bozán)

Disgraciao en el amor


 (Pintura: Molina Campos)
 
Era una tarde limpita,
tenía el cielo un azul puro,
casi poniéndose oscuro
porque se dentraba el sol.
Cuando en la plaza'el Congreso
me subí a una "bañadera"
que después dió en su carrera
más güelta que un caracol.

Entre tanta gente extraña
solo, arrinconao me hallaba,
cuando, para mí, pensaba:
"¿Quién hará el viaje a mi lao?"...
Hasta que llegó una rubia
de lo lindo que Dios hizo,
diciendo: "Con su permiso"
y me miró de costao.

Pa mi, que me hizo mal de ojo,
porque alteró mi sosiego
dentrándome como un fuego,
el corazón aletió.
Le respondí: "Usted lo tiene"
y miré pa'l lao de ajuera...
Arrancó la bañadera
y así el viaje comenzó.

-"¿El señor es forastero?",
me dijo casi en la oreja,
y en el arco de la ceja
le quedó un rulo enredao.
Le respondí: "Linda moza,
me lo endivina cualquiera...
Yo vine al pueblo de ajuera,
de las costas del Salao".

Me convidó pa la güelta
a un paseo de lo lindo
y yo que al amor me rindo
fui enredando una ilusión.
Hasta que al final del viaje,
prendido del brazo de ella,
me confié a mi güena estrella
pa mi desesperación.

Así acollaraos subimos
a un auto que allí pasaba
y la muchacha ordenaba,
pa'nde teníamos que dir.
Rodamos cuadra, tras cuadra
y dimos güelta tras güelta
hasta que riendo y resuelta
me convidó pa'salir.

La moza bajó primero
y cuando yo me asomaba,
del cogote me agarraba
un hombre mal entrasao.
Con la punta del cuchillo,
otro mi pecho urgueteaba
y otro apurao me saquiaba
al verme casi estaquiao.

Me dejaron: livianito,
sin armas, plata, sin nada,
y era de oír la carcajada
de la rubia de mi flor.
Diciéndome: "¡Gaucho sonso,
no te olvidés, pa más luego
que es el suertudo en el juego
desgraciao en el amor!".

En un ómnibus pichón



 
Me vi obligado a viajar
en un ómnibus pichón,
y en tal mala situación
que nunca podré olvidar.
Dentrando a considerar
que tal vez el que ha inventao
el coletivo afamao
debió ser algún petizo,
porque de tal modo lo hizo
que el alto viaja doblao.

Son pa tres nalgas, agatas
los asientos de un costao,
y pa dos, los del otro lao
ande hay que doblar las patas.
Coches lujosos, de latas,
disparadores, de a ratos
cobran los viajes baratos
pero el que quiere viajar
áhi se tiene que agachar
mesmo que pa cazar patos.

A una gorda le sobraba
un pedacito de asiento,
l'único en aquél momento
que pa la gente se hallaba.
La cosa resultó brava,
cuando me acerqué a la Ñata
que encarándome a lo gata,
apretó a la sejijunta;
yo me acomodé en la punta
como gallo en una pata.

Un alto se había arreglao
en un asiento chiquito
me dio pena el pobrecito,
verlo en tres partes doblao.
En el suelo, había afirmao
la mano, por distracción,
cuando el ómnibus pichón
disparaba, a rienda suelta,
pa no cairme al dar la güelta
le dí al flaco, un pisotón.

Y se armó una de mi flor:
con la mano pisoteada,
me encajó una cachetada
con un: "¡Perdone señor!"
y ya dentrando en calor,
la gorda, sin más cumplido:
"¡Bienhecho por atrevido!"
gritó, -mientras resoplaba-
diciendo que le engrasaba
con la bota su vestido.

El "chuffer", dentró a gritar
que aquello no era un boliche
y yo más manso que un piche,
no tuve más que aflojar.
En eso se oyó chiflar
al vigilante apurao.
Un camión grande y cargao
nos afirmó un ocicaso
y salimos de aquél paso,
cada uno descoyuntao.

El hombre malo


(Pintura: Gustavo Solari)

Echao contra el mostrador
teniendo una copa al lao,
un hombre, mal entrazao
y forastero, pa pior.
Cruzándole el tirador
un facón de media vara,
llevaba escrito en la cara,
juntando sus expresiones
un montón de trompezones
pa que naides, se acercara.

Traiba el caballo cansao,
quién sabe de ande venía,
y aunque a naides conocía,
le tejieron un pasao.
Era aquél hombre, mentao...
Peliador y camorrero...
mal pagador... ventajero,
y no tenía condición,
ni pa trabajar de pión...
por eso se hizo cuatrero.

Había cerquita una yerra,
ande cada uno lucía
la habilidá que tenía.
¡Costumbre de nuestra tierra!
Ande cada hazaña encierra,
un lujo de arte campero.
Hasta allí fue el forastero
pa demostrar condiciones,
con permiso 'e los patrones,
solito, sin aparcero.

Ya estuvo en una jugada
ande lo habían provocao,
pero él se arrolló obligao
lo mesmo que pata asada.
Cruzao de brazos pa nada
quiso sacar el facón.
Desconcertando al montón,
con esa serenidá,
que resultó a la verdá
una güena condición.

¿Peliar? ¿Pa qué? -le decía-
se van a mellar los fierros,
pa peliar están los perros,
pa los que no hay polecía.
Si yo dentro a una porfía,
no es para mostrar mi facón.
Y no me achico al montón,
ni a cabrestiarles me avengo,
sobre todo cuando tengo
de mi parte la razón.

Juntito al fogón se hallaba,
el hombre malo del cuento,
ande un chiquitín atento
un cimarrón le alcanzaba.
Sobre las brasas, la pava
estaba como seseando
y áhi cerquita, festejando
la habilidá'e la pionada
cruzaba la carcajada
el aire, como volando.

De repente, del corral,
sale un toro hecho una fiera,
atropella puesta ajuera,
corneando el bravo animal,
y fue un grito general
cuando enderezó al fogón.
El gaucho sin dilación
levantó el chico asustao...
y allí murió destrozao
por tener güen corazón.

(Pintura: Miguel García Sáez)








De regreso




Vengo pegando la vuelta
en una noche estreyada,
la hacienda ya fue entregada
sin que falte un animal,
con buen estao general,
bien comida y descansada.

Galopiando con la fresca
cruzando esos campos bajos
voy al compás del badajo
de mi cencerro puntero,
con este orguyo campero
del qu’hizo bien su trabajo.

El montao tras la tropiya
viene escarciando con ganas,
un contrapunto de ranas
murmuran los cañadones
y una neblina a girones
se alza en lagunas cercanas.

Yo voy chiflando bajito
algún estilo pampiano
viendo sus ojos lejanos
ayá en la estreya más alta.
¡Pucha! que poco hace falta
p’hacer feliz a un cristiano.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Cumpa Paulino (Estilo)


A la memoria de Paulino Ortellado quien tenía una "Guitarra llena de calandrias"...
 
¡Garúa lindo y tupido!
¡Mate amargo y rancho islero!
El pique estaba mañero
y gané  temprano el  nido.
El viento se hace el dormido
entre el sauzal apenado
y en el paisaje callado
como pendiendo de un hilo
la intimidad de un estilo
le va entrando al encordado.

Flor del aire, panadero
de algún cardal desprendido
que a mi guitarra ha traído
confidencias del pampero,
y en el silencio costero
las bordonas del destino
le van abriendo camino
para que encuentre la estampa

Cruz del sur y poncho pampa
de mi compadre Paulino.
Voz serena en la llanura
que llega hasta el horizonte,
corazón que en medio ´el monte
siente el latir de su hondura;
río que pasa y perdura,
casi oración del paisano…
y es islero y es pampeano:
caldén, timbó y flor de lino
por eso cumpa Paulino
yo se lo dejo en sus manos.

Milonga para Jacinto Chiclana




Me acuerdo, fue en Balvanera,
en una noche lejana,
que alguien dejó caer el nombre
de un tal Jacinto Chiclana.

Algo se dijo también
de una esquina y un cuchillo.
Los años no dejan ver
el entrevero y el brillo.

¡Quién sabe por qué razón
me anda buscando ese nombre!
Me gustaría saber
cómo habrá sido aquel hombre.

Alto lo veo y cabal,
con el alma comedida;
capaz de no alzar la voz
y de jugarse la vida.

(Recitado)

Nadie con paso más firme
habrá pisado la tierra.
Nadie habrá habido como él
en el amor y en la guerra.

Sobre la huerta y el patio
las torres de Balvanera
y aquella muerte casual
en una esquina cualquiera.

No veo los rasgos. Veo,
Bajo el farol amarillo,
El choque de hombres o sombras
Y esa víbora, el cuchillo.

Acaso en aquel momento
En que le entraba la herida,
Pensó que a un varón le cuadra
No demorar la partida.

Sólo Dios puede saber
la laya fiel de aquel hombre.
Señores, yo estoy cantando
lo que se cifra en el nombre.

Entre las cosas hay una
De la que no se arrepiente
Nadie en la tierra. Esa cosa
Es haber sido valiente.

Siempre el coraje es mejor.
La esperanza nunca es vana.
Vaya, pues, esta milonga
para Jacinto Chiclana.

martes, 11 de diciembre de 2012

Canto por vos



Dame la savia de tu tiempo verde,
toma el silencio terminal del día,
quiero ajustar mis manos a tu sombra
y envolverme en tu azul melancolía.

Dame el tiempo dorado de tus ojos,
toma la rosa que en mi sangre habita,
dame esta noche tu insomnio penitente,
toma mi sombra, mi canción de espiga.

Dame tu nombre para hacer un templo
en la cuspide gris de mis colinas
quiero tu voz de rio y de salitre
para el retumbo musical del clima.

Dime que puedo deshojar mi canto
sobre el puente sonoro de tu risa
te ofrezco en cambio los pájaros de octubre,
la callada ilusión de esta alegria.

Quizás mañana el viento de mis manos
lleve a tus manos la ofrenda prometida,
tal vez la guardes, como yo tu sombra,
tal vez la quieras por humilde y tibia.

Mi hermano... el hornero



Tiene las manos callosas,
gloria gris de los obreros,
manos que hieren las dagas
heladas de los inviernos.

Manos fuertes insensibles
quemadas en los eneros,
pero para sus cachorros
son de seda y terciopelo.

Cuántas casas levantaron
y las que iran construyendo
porque en su sangre aletea
la inquietud de los horneros.

Yo lo he visto contemplar
sus obras, ¡tan satisfecho!
y luego rumbear a su rancho
cabizbajo y en silencio.

Destino de construir
bajo los azules cielos,
albergues que son un lujo
pero para otros puebleros.

Eso me duele en el alma
porque mi hermano "el hornero"
vive en un rancho cualquiera
sufriendo penas y sueños.


lunes, 10 de diciembre de 2012

La Nostalgiosa (Salmos criollos: 41 y 42 / 42 y 43)


(Fotos: Pilar Herrero Lizaso)

1
Como busca la bebida
la hacienda que anda con sed,
así te busca mi alma,
Señor, y te quiere ver.

2
Las lágrimas son mi pan
cuando escucho acobardado
lo que la gente me dice:
"¿Tu Dios no te habrá olvidado?".

3
Se agolpan en mi memoria
los recuerdos de otros tiempos
cuando rumbiaba a tu casa
entre el gauchaje contento.

                                          Vamos alma, no te hundás
                                           ¿por qué perdés la confianza?
                                           Algún día nuestro Dios
                                           cumplirá nuestra esperanza.

4
Me acongojo al evocarte
mientras añoro tus cerros,
y un recuerdo llama al otro
como en la noche los perros.

5
De día me has de escuchar
y he de alabarte de noche.
¿Por qué he de andar amargado
vagando como un fantoche?

6
Me quema en los caracuces
la burla de los malvados,
todo el día me preguntan:
"¿Tu Dios, no se habrá olvidado?".

                                           Vamos alma, no te hundás
                                           ¿por qué perdés la confianza?
                                           Algún día nuestro Dios
                                           cumplirá nuestra esperanza.

7
Librame de los traidores,
no me tratés con reproche:
¿por qué he de andar amargado
vagando como un fantoche?

8
Que tu luz y tu verdá
alumbren nuestro camino
y conduzcan nuestras huellas
hasta el abrazo divino.

9
Que yo me acerque a tu altar,
al Dios de mis alegrías,
y mi guitarra acompañe
la canción agradecida.
                                        
                                           Vamos alma, no te hundás
                                           ¿por qué perdés la confianza?
                                           Algún día nuestro Dios
                                           cumplirá nuestra esperanza.

        

viernes, 7 de diciembre de 2012

Los Picasos de Olivera


(Foto: Eduardo Amorim)

Viene subiendo el repecho
un criollo de altiva estampa,
montao en un pingo pampa
que pega la pera al pecho
y al verlo ansina aprovecho
pa’ir destacando su esmero,
en el tuse, en el apero,
en cola, oreja y ranilla
y en el lujo ‘e su tropilla
que es su orgullo de campero.

Señores viá presentar
al gaucho Lucho Olivera
que trae una yegua overa
con un moro de ‘lunar’,
la estancia “El Espartillar”
representa en este caso,
su experiencia es como un lazo
que apreta trece cogotes
y hoy la va siguiendo al trote
su tropilla de picazos.

Un cencerro charlatán
le va hablando a la distancia
de amores viejos y estancias
por los pagos de Pirán,
y en sus clarinadas van
hablando de cada doma,
tropillas, viejo no es broma
le aclaro bien ese punto
de día salieron juntos
de la estancia “Siete Lomas”.

Después le brindó el destino
los premios de su trabajo
y el golpear de su badajo
le fue marcando el camino
y al verlo tan argentino
se hace milonga un suspiro
porque ocasiones me inspiro
al ver gauchadas como estas,
que sigue siendo una fiesta
dir con la yegua de tiro.

 


Travesura'e dos mensuales

Igual que’n los vendavales
si el “pampero” se desboca
yo vi dentrar como loca
la manada en los corrales,
travesura ‘e dos mensuales,
rienda suelta de dos ansias,
que aprovechan la distancia
de un día de cerrazón
pa’ hacer andar el garrón
ya que no ven de la “Estancia”.

Atao en unas varillas
de la costa ‘el alambrao
hay dos pingos ensillaos
barajando las presillas,
los perros por una orilla
no dentran al entrevero,
hay un pingo coscojero
que los tiene sorprendido,
dos veces se han confundido
con el grito de los teros.

Mientras estiran los lazos
en tres tirones, los pillos,
le van cantando los grillos
de la espuela a cada paso,
el rebenque por si acaso
colgao en la fariñera
y al dir a’brir la tranquera
las yeguas en un istante
se llevaban por delante
con gana’e salir pa’fuera.

Son dos criollos al acecho
y una yegua que se escapa
entre el chiflar de las yapa
de un revés y de un derecho,
son dos lazos que hasta el pecho
se vuelcan como una ola,
la yegua se hace una bola
al sentirlo en las rodillas
y hace un surco en las gramillas
con el marlo de la cola.

Y en medio ‘e la polvadera
al grito de “abran cancha”
el más muchachón engancha
prendido de las clineras,
ni rodaja, ni sotera
sabemos que le mezquina,
son cosas de esta Argentina
que’n mis pagos fue creciendo,
y áhi nomás salió corriendo
con un puñado de clinas.

jueves, 6 de diciembre de 2012

Día Nacional del Gaucho!!!!




En éste día... NACIONAL del GAUCHO:

recordamos el  pasao,

miramos lo presente...


y apostamos al futuro ...

con munchos más gurises...

"GAUCHOS"  !!!...que aman las tradiciones

como Nahuel Montenegro!!!

Día Nacional del Gaucho!

A 140 años de la publicación de la primera parte del Martín Fierro...


¡Feliz día pa'tuitos!!!

Y ojalá cada uno pueda decir: ¡Feliz Día!:

"Al Gaucho que llevo en mí, sacramente, como la custodia lleva la hostia"!

miércoles, 5 de diciembre de 2012

¡¡Podemos comer barato!!





Me dicen que puedo comer
con seis pesos solamente,
un desayuno caliente
almuerzo, cena y beber,
esto a mi modo de ver
es tomarnos por boludos,
hay que ser muy corajudo
o tal vez muy desmadrado,
decir eso a  un jubilado
o al que no tiene laburo.-

Con seis pesos no se puede
ni comprar un chocolate,
tampoco la yerba mate
porque el precio nos agrede,
la carne mejor se quede
colgada siempre del gancho,
y si quiero comer chancho
tan solo con esa guita,
me darán una tripita
para sobarla en el rancho.-

Tal vez estudie de mago
para poder resolver,
este asunto de comer
solamente con seis mangos,
¡¡fuera de aquí maturrangos!!
basta de risa y falsía,
no se adueñen de los días
de la gente honrada y leal,
que a la patria le hecha un pial
para abrazarla a porfía.-

Nos mienten sin sonrojarse,
nos tomaron por idiotas,
pero ya en el aire flota
las ganas de revelarse,
cada uno ha de pararse
de frente y sin recular,
pues si nos ven claudicar
como esclavos viviremos,
y nunca jamás tendremos
honradez ni dignidad.-