porque no
vivo a lo rico;
el rancho
está muy pelao
y el patio
está desprolijo.
Dicen que
debía hacer quinta;
plantar muchos “ocalitos”
y hasta
votar po’el gobierno
pa’ tener
un puesto lindo…
Yo, pa’
decir la verdá,
de esas
cosas no preciso;
es más
grande lo que sueño
y más
variao lo que miro…
No quiero
plata a montones,
yo la gasto
de a poquito…
y que de a
poquito venga
así no
recargo el cinto…
Prolijo o
despreocupao
no haciendo
mal, da lo mismo…
Si al que
mira no le gusta
que cambie
a su vista el trillo…
Además,
sabe la gente,
que yo a
naides le prohíbo
que haga
quinta, adorne el rancho,
o plante
mucho “ocalito”.
Y menos que
vivan pobres
los que
quieran morir ricos;
ni que “lamba
la coyunda”
pa’ alcanza
algún destino…
Si pa’
quedarme me sobra,
pa’ dirme,
también, colijo!
Y siempre’óido
que los pobres
van pa’l
cielo derechito…
¿Será por
eso que el cura
si les
reza, no hace ruido,
y canta
fuerte empujando
pa’l cielo’el
alma’e los ricos…?
He de
seguir como soy!
Que otros
planten “ocalitos”,
yo con lo
poco que tengo
me voy
mareando muy lindo.
Sabido es a
las mortajas
naides les
pone bolsillos…
Y si ese
viaje es largón…
hay que hacerlo
de vacío,
¿pa’ que
debo andar cargao
en un
trecho corto y lindo,
donde me
gusta cantar
más que
plantar “ocalitos”…?
No hay comentarios:
Publicar un comentario