lunes, 14 de julio de 2008

Por regalar unos guantes.

Quien aguante este tormento
y este dolor que me agobia,
¡Señores, perdí a mi novia,
porque quise ser atento.
Por eso es que el sufrimiento
me brinda el cruel desengaño
pues yo mismo me hice el daño
que hoy me mate de a poquito,
por hacerle un regalito
ayer día de su cumpleaños.

Pa que viera la chirusa
que pa'l amor soy constante
le regalé un par de guantes
bien forrados en gamusa.
-"qué contenta la papusa
se va a poner"!, yo pensé;
porque los de ella, bien se,
están rotos y manchados
y con los recién comprados
para el rancho enderecé.

Cuando llegué al rancho,
ví dos cajas en la mesa
y con gran delicadeza
los puse en una a lo ancho.
Lo llamé al peonsito "Juancho"
un criollito retardao:
-"Andá hacerme este mandao",
así le encargué al sotreta
-"y encajame esta tarjeta,
en la caja y con cuidao".

No va y se equivoca el peón,
como justo había dos cajas,
y en la contraria le encaja
la tarjeta, aquél bobón.
Fíjensen qué papelón,
¡maldita suerte traidora!
cómo puedo hacer ahora
y quién se iba a suponer,
que en la otra caja iba'haber:
dos calzones de señora.

Era una caja igualita
que el patrón había comprao
y que le había encargao
su mujer "misia Juanita".
Estas palabras escritas
yo le encajé a la tarjeta:
"recibí prienda Marieta,
este regalo que es mío,
este obsequio que te envío
como prienda muy discreta".

"Mi querida: te los mando
por ser día 'e tu cumpleaños,
estos son de mejor paño:
más grandes, suaves y blandos.
Dentran y salen volando
en un apuro mi china,
fabricación Argentina
parecen ser de gamusa,
estos no dejan pelusa
porque son de clase fina".

"Y al no acordarme siquiera
la medida que calzás,
con su licencia ahí nomás
se los probé a la tendera.
Complaciente la pueblera,
no vaciló en conformarme,
yo , para asegurarme
la buena mercadería
cuando puestos los tenía
los manosié hasta cansarme".

"Con fuerza los estiré
solo pa ver si cedían
pero como resistían
con suavidad los traté.
Y luego les hurguetié,
una a una las costuras
y al parecerme algo duras
entré a sobarlas a dedo,
sobre todo las del ruedo
ande acaba la verdura".

"Y ansí antes de abonarlos,
como estaban calentitos
un instante colgaditos
los dejé pa ventilarlos.
Y luego al empaquetarlos,
me dijo: "Vea Señor,
tienen un poco de olor
a bolas... de naftalina,
que los ventile su china
y se les irá el jedor".

"Rotos y sucios por demás,
están los tuyos mi china
y antes de ir pa' la cocina,
primero te los sacás.
Espero los cuidarás,
nunca los dejés tiraos;
por tenerlos abandonaos
a los otros los concluistes:
y en un invierno anduvistes
sin los que hoy te he regalao".

Y aura no hay más que sufrir
por esa equivocación
¡perdí mi novia!, patrón,
solo me queda el decir:
Mi china no quiere oir
de mi más explicaciones,
no quiere entender razones
y dice que me he burlao...
Total lo que me ha pasao
fue por un par de calzones.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hermoso! mi papá lo recitaba acompañado de su guitarra y era "furor" en las reuniones.
Gracias por ponerlo aquí.
Sandra

CONCHITA dijo...

POBRE CHINITA,JAJAJAJA CON TANTAS EXPLICACIONES LA CHAFO. INTENTELO OTRA VEZ ESTA VEZ SE LO DE EN MANO Y CON UN RAMITO DE FLORES QUE ESO ABLANDA MUCHO . MUY BUENO EXTRAORDINARIO. DESDE ESPAÑA UN SALUDO.CONCHITA